Una entrevista con Raquel Acalá
Biblioteca de UCLA, Centro de Investigación de Historia Oral, Universidad de California, Los Ángeles Una entrevista con Raquel Acalá

Transcript

Sesión 1 (8/15/2020)

00:01:10





LEGRESLEY:

Hoy es el 15 de agosto, 2020. Son las tres de la tarde. Me llamo Megan y estoy hablando con Raquel para el Centro para el Estudio de las Mujeres en UCLA. ¿Cómo está usted?





ALCALÁ:

Muy bien, gracias.





LEGRESLEY:

¿Usted es miembro de la Coalición de Trabajadores?





ALCALÁ:

Sí.





LEGRESLEY:

¿Podría describir su trabajo con la Coalición?





ALCALÁ:

¿Mi trabajo con la Coalición o mi trabajo como limpiadora de casas?





LEGRESLEY:

Los dos sería perfecto.



00:04:33

ALCALÁ:

Sí. Mi trabajo limpiando casas, piensa uno que es como lo que hace uno en la casa todo el tiempo. Piensa uno que es lo mismo que en su casa. ¿Verdad? Dice uno, limpiar en la otra casa es lo mismo. Pero no, porque es hacerlo diario con muchos líquidos. Por ejemplo, el baño de mi casa yo no lo limpio todos los días con tanto químico. Entonces cuando vas a limpiar casas--un día te toca una casa, otro día otra casa y así, ¿verdad?

Entonces en el tiempo que yo pienso que yo me enfermé de mi pulmón, estaba trabajando para una compañía--estaba limpiando casas, pero también trabajando para una compañía que ellos--la señora trabajaba en un realty (sic). Ella compraba casas, las arreglaba y las vendía más caras. Entonces eran casas que las personas perdían en foreclosure y todas esas cosas. Entonces a veces las casas estaban muy abandonadas, muy feas y, sobre todo, los baños estaban feos. Entonces yo sí los limpiaba con muchos químicos--los toilets, las tinas, los azulejos--y sí, hasta cuando terminaba de hacer ese trabajo, se me iba la voz de lo fuerte que me quedaba el liquido. Se me iba la voz. Pero yo no pensé que después en el futuro iba a traer consecuencias.

Después de tanto hacerlo--pues con ella trabajaba cada semana o cada dos veces a la semana. Según ella tenía las casas de limpiar. En una ocasión, yo llegué a limpiar un apartamento. Vino una vecina de los mismos edificios ahí a hablar con ella. Cuando yo llegué, ella llegó. Y miró como estaba el baño y todo, ¿verdad? Entonces se fue. Cuando yo terminé de hacer mi trabajo, esa persona regresó y no lo podía creer. Se quedó asombrada que no parecía el mismo baño. Entonces la señora que me tenía contratada le dijo, "I told you. Te dije ella es buena limpiando los baños. No tengo que reparar." O sea, no tiene que tumbar todo eso para hacerlo nuevo, porque con la limpieza que le daba quedaba bien.

Pero aparte de eso, pues me pagaba muy poco, apenas cincuenta, cincuenta y cinco dólares. Cuando le pedí aumento a sesenta, ya no me contrató más. Con el tiempo pues me apareció que tengo una mancha en el pulmón, aquí en el pulmón izquierdo. Me da neumonía cada tres meses. Me tienen que dar tratamiento cada tres meses porque siempre encuentran esa mancha y está guardando líquido.

Mi trabajo con la Coalición me gusta mucho porque, pues, yo ya estoy mayor. Yo ya pasé por el cuidado de la limpieza de casa. Yo sé que ahorita no pudiera hacerlo más, porque apenas limpio mi casa y no pudiera hacer más, porque los líquidos nada mas--me hice como alérgica. En cuanto me da el olor de un líquido, siento que me hace toser y me lastima.

Aparte de eso, uno nunca ve las consecuencias, porque por cincuenta dólares que ella me daba, no me ajusta para el doctor. No me ajusta ahora para el doctor. Los doctores son muy caros. Entonces en junio tuve que ir a la emergencia. En junio tuve que ir a la emergencia porque me dolía, me dolía mucho mi pecho. Estuve tratando de quedarme en la casa porque no quería ir a la emergencia, ¿verdad? Porque no tengo seguro médico. Y lo que pasó fue que, pues, ya no aguanté más y dije yo, ¿Que tal si no es el pulmón, sino a lo mejor me está dando un ataque al corazón porque me ha empezado a doler para el brazo? ¿O a lo mejor es el virus? Yo no sabía ya, si era a lo mejor el virus. Entonces me fui de madrugada a la emergencia y dijeron que era que el pulmón tenía líquido.

Y dije, ahora me está dando cada tres meses. Porque me dio la primera vez y luego se espació mucho tiempo y luego me dio, pero ahora ya me da con más frecuencia. Entonces, ahora ya no aguanto, por ejemplo, cuando hace mucho frío--es el dolor. Y te digo, por ganarse uno a veces cincuenta dólares, pierde uno más su salud, que es lo más importante. Y peor que no tiene uno seguro médico. No tiene uno una garantía. Entonces por eso mi trabajo en la Coalición es eso, que me gustaría muchísimo que las personas que siguen haciendo ese trabajo puedan beneficiarse de alguna manera, teniendo por lo menos un seguro médico o por lo menos algún--algo que les ayude para que no queden dañadas ya de por vida. Porque como te digo, ya para la edad que yo tengo, pues a lo mejor ya para mi no, ya tengo el daño. Pero para las personas que lo están haciendo ahorita, yo sí quisiera que hubiera algo así. Algo que les pueda ayudar, ¿verdad?





LEGRESLEY:

¿Cuándo era niña, su salud estaba bien? ¿No tuvo problemas--sólo después de trabajar en las casas y limpiar las casas?





ALCALÁ:

Cuando yo era niña, yo no. En realidad, ahorita no tengo condición médica: yo no tengo diabetes, no tengo alta presión, no tengo nada de eso. Solamente tengo mi tiroides. Y esto que tengo en el pulmón. Cuando yo era niña solamente, lo único que mi mamá nos daba era vitaminas.





LEGRESLEY:

¿Y cuánto tiempo lleva trabajando en la industria?





ALCALÁ:

¿De limpiar casas? Fueron como diez años. Son como diez años, más.





LEGRESLEY:

Tengo algunas preguntas cortas. La primera es, ¿cuándo y dónde nació?





ALCALÁ:

Yo nací en junio 4, 1961 en Michoacán, México.





LEGRESLEY:

¿Y tiene hermanos o hermanas?





ALCALÁ:

Sí. Tengo nueve hermanos. Cinco hermanas somos y cuatro hermanos.





LEGRESLEY:

¿Y cual era el oficio de sus padres?





ALCALÁ:

Mi papá--cuando vivíamos en Michoacán, él trabajaba de agricultor en el campo, pero después nos venimos a vivir a Tijuana, en la frontera. Y él ahí trabajaba en un restaurante. Mi mamá era del hogar solamente. Lavaba, cocinaba, nos hacía la ropa porque éramos muchos niños y no les ajustaba el dinero para comprar tanto. Pues ella miraba la manera de más ahorrar y ella nos cosía. Ella sabía coser y nos hacía la ropa y si no estaba lavando en el lavadero, estaba cocinando o estaba sentada en la máquina haciéndonos ropa. Ese era su trabajo de ella.





LEGRESLEY:

¿Qué tipo de productos recuerda en su casa, cómo los productos de limpieza, o otros olores?





ALCALÁ:

Mi mamá, lo que le gustaba mucho era solamente limpiar con jabón y con vinagre, o a veces hasta le ponía limón a la ropa y se limpiaba la ropa. Pero yo pensaba en ese tiempo--yo no pensaba que porque hacía mal o que nos iba a hacer daño, yo pensaba que porque no tenía dinero para comprar algún químico. Pensé eso, ¿verdad? Porque decía échale un chorro de limón y allá a la mancha le echábamos un chorro de limón y lo dejábamos poquito en el sol y se le quitaba la mancha a la ropa. Pero yo pensaba que porque no teníamos dinero para comprar cloro.





LEGRESLEY:

¿Y cuando emigró a los Estados Unidos?





ALCALÁ:

Fue en el año 1995.





LEGRESLEY:

¿Ha hecho otro tipo de trabajo en los Estados Unidos?





ALCALÁ:

Sí. He sido cuidadora de niños y también trabajé de cajera. Y también he coordinado talleres para padres en las escuelas.





LEGRESLEY:

¿Y hay una experiencia en el trabajo cuando sintió que su trabajo requería estar cerca de productos químicos, o las primeras veces en que su salud estaba un poco mal por los químicos?





ALCALÁ:

Pues sí, te digo que las experiencias que tuve y también por lo que me decidí mejor retirarme de limpiar las casas era que no tenía ningún beneficio. No tenía seguro médico, nadie garantizaba mi sueldo. Porque una vez limpiamos una casa, mi hija y yo, de una emergencia, porque a la familia se le había muerto alguien. Iban a venir más familias, y era una casa grande. Entonces limpiamos la casa y le dije a la persona: "Si nos das la casa cada dos semanas, te voy a cobrar sesenta." Okay, le cobré sesenta. Pero la próxima semana que regresamos a limpiar la casa, no nos abrió la puerta. Entonces, ese día hicimos mucho trabajo por casi nada de dinero. Pero yo dije, lo más trabajo que haga, cuando yo regrese no va a haber tanto sucio. Y aparte iban a llegar visitas al funeral. Entonces también por ayudar a la señora, pero después ya no nos abrió la puerta.

Entonces, para los químicos. Cuando empecé a ver que se me iba la voz y duraba dos días o tres días sin voz y con roncas, así como afónica, y me dolía para acá, hasta para el pecho--era cosa de que me tentaba así, me dolía--entonces, fue que me decidí mejor de buscar otro trabajo que me diera un poquito más garantía de mi salud solamente. Ya si no es tampoco mejor pagado, pero me da un poquito más de garantía de mi salud. Porque de verdad que la--por ejemplo, en la compañía en que yo cuido a los niños, no es un seguro médico, pero si algo me pasa, ellos tienen una clínica donde me llevan. Entonces a mi en las casas si algo me pasa, yo tenía que buscar mi propio médico. Y lo tenía que pagar con mi propio dinero. Entonces lo de la casa no me ajusta ni siquiera para ir a una consulta, menos a una emergencia.





LEGRESLEY:

¿Sí hay medicinas que ayudan, o no sabe porque no tiene la habilidad de ir a un médico?





ALCALÁ:

Ahora si tomo medicinas, solamente me dan antibióticos. Cuando me da la neumonía, me dan antibióticos y esteroides, para que pueda respirar mejor. Me dan un inhalador.





LEGRESLEY:

¿Y es posible usar sus propios productos, o porque las casas son muy sucias, no es posible usar productos que no son tan tóxicos?





ALCALÁ:

Pienso que las casas son muy sucias porque tenían mucho--aparte de eso de que estaban los químicos--son casas que están tan sucias, con mucho moho. Entonces, tallando el moho--tampoco eso yo no lo sabía. Después tomé un entrenamiento y supe que el moho que uno talla también lo absorbe, y si no usas mascarilla, eso también te daña.





LEGRESLEY:

¿Tiene una familia? ¿Tiene hijos o un esposo o esposa?





ALCALÁ:

Sí. Tengo mi esposo y tengo tres hijas mayores y una nieta de dieciséis.





LEGRESLEY:

¿Y la salud de su familia está bien?





ALCALÁ:

Sí, gracias a Dios también.





LEGRESLEY:

¿Y para usted, su salud ha cambiado sus pasatiempos o relaciones, por ejemplo, con sus amigos?





ALCALÁ:

Pues sí, porque mira. Por ejemplo, en diciembre me dio--cuando me da la neumonía, por ejemplo, ahora que, en marzo, en junio, me dio la neumonía, y yo ya presentaba síntomas. Entonces, decían que a lo mejor era el virus. Me hacían como para acá, ¿verdad? Las amistades me decían, "A la mejor tienes el virus. ¿Ya te fuiste a hacer la prueba?" Les digo, "No, no es el virus porque me dio--en diciembre, me dio la neumonía. En marzo, me dio la neumonía. En junio me dio la neumonía." Entonces cuando me dio en marzo, sí me miraban como que a lo mejor es el virus lo que tienes. Me sentí un poco discriminada, porque no tenía--entonces lo que hice mejor, pues fue quedarme aquí adentro en la casa, cuando ya me recuperé un poco. Pero después volví a recaer, pero es la neumonía, no es el virus.





LEGRESLEY:

¿Usted está trabajando ahora, o sólo está en casa?





ALCALÁ:

Apenas tengo dos semanas--tomé un trabajo. Porque ya ves cómo está la situación ahorita que no hay mucho trabajo. Y mi esposo se quedó sin trabajo, ya no le regresaron su trabajo. Se tuvo que buscar otro y apenas también empezó casi a trabajar. Mi hija también tiene dos semanas apenas trabajando. Vivimos los tres en la casa. Mis otras dos hijas viven en la misma dirección, pero tienen atrás sus casitas. Entonces los que vivimos dentro de la casa somos mi hija--la menor, la soltera--y mi esposo y yo. Pero nos íbamos a poner ya en mala situación económica porque lo que teníamos ahorrado se estaba terminando y ninguno de los tres trabajó desde marzo hasta junio o julio.

En julio fue cuando mi esposo agarró trabajo y después mi hija agarró trabajo ya hace dos semanas y igual yo. Y estoy trabajando ahorita en una cocina de una taquería. Pero yo no sé si es porque estoy mal, yo no sé si es por la edad, pero sí, es pesado para mi ese trabajo. Yo no sé si porque me guardé toda la cuarentena o tenía mucho tiempo que no trabajaba así de--porque ahí no hay un momento de descanso. También igual solamente nos dan el break de media hora a las cuatro horas. No hay break de diez minutos o quince minutos cada dos horas. Entonces es solamente el break para ir al lunch y nos lo descuentan. No lo pagan. Es un break descontado. Entonces no estoy tan feliz. Estoy contenta porque por lo menos tengo trabajo, pero no estoy tan feliz con el trabajo. Aparte me ofrecieron $15.50 la hora y nada más me pagaron $15.25 en mi cheque. Apenas acabo de agarrar el cheque, mi primer dinero, y salió $15.25 la hora. Mire que me descontaban la media hora de lunch, y quisiera encontrarme un trabajo más de acuerdo con mi edad, más de acuerdo con mi salud, porque no estoy como para andar así rápido, rápido. Por mi salud, no puedo estar tan.





LEGRESLEY:

¿Hay algo en lo que está trabajando en este momento con la Coalición con relación a la crisis?





ALCALÁ:

Solamente, la Coalición, pues hemos--los trabajos que salen. Que si estamos buscando diferentes ayudas, llamamos a los representantes, a los senadores, para pedirles que nos den apoyo, que cambien las leyes o que nos pongan una ley que nos ayude o nos proteja.





LEGRESLEY:

¿Cuánto tiempo ha sido parte de la Coalición? ¿Diez años, o menos?





ALCALÁ:

Cinco.





LEGRESLEY:

¿Qué le inspiró a unirse la Coalición?





ALCALÁ:

En la lucha o en grupo, ¿verdad? Me miraba: ¿qué puedo hacer yo? Mi propia voz--nadie me va a escuchar. Pero sí somos muchas en grupo, alguien nos tiene que oír. Por ejemplo, si yo llamo a un representante de nuestra comunidad para pedirle algo, a lo mejor ni me escucha o a lo mejor tira mi papel a la basura. Pero cuando nosotros nos ponemos todas en el mismo día, hacemos cada quien una llamada. Entonces nos están escuchando ya, porque somos muchas.





LEGRESLEY:

¿Hay algo de lo que está orgullosa en términos de su trabajo?





ALCALÁ:

Orgullosa yo de mi trabajo--¿del que estoy haciendo ahorita o del que hice antes?





LEGRESLEY:

Los dos, si es posible.





ALCALÁ:

Pues mira. Del que hice antes, sí estoy muy contenta. Ese trabajo lo perdí por la pandemia, el cuidado de niños. Me gusta muchísimo ese trabajo. También--¿cómo te diré? Ahí perdí mucha habilidad de correrle--córrele para acá y córrele para allá con los niños, porque es sentarse y jugar. Entonces mi niña interior salió también a jugar con muñecas, a la comidita, a cantar canciones, a jugar pelota. Todo eso es un trabajo muy bonito con los niños--platicar con los niños, la inocencia de los niños, ¿verdad? Las ideas que tienen los niños y el reírse uno con ellos, y todo eso.

Y del trabajo que estoy haciendo ahorita, pues ahorita apenas tengo dos semanas, pero me siento--te digo que--orgullosa de mí porque es un trabajo que pensé yo que ya sabía hacer porque es en la cocina y pues a mí me gusta cocinar, pero nada que ver con la cocina de un lugar donde se hace comida para vender. Entonces no es lo mismo cocinar dos tomates en mi casa o picar dos tomates en mi casa que picar una caja allá. Y no nada más es ir a picar la caja de tomates, es ir a hacer mil cosas. Entonces estoy orgullosa de mí misma porque hasta ahorita lo he logrado. Voy lento, pienso, pero seguro. Pero sí, hay días que digo, "Ay, me dan ganas de no levantarme, ya no quiero ir." Porque llego súper cansada, es súper, súper cansado ese trabajo. Ocho horas parada es súper cansado. Pero tengo ya cincuenta y nueve años y todavía lo he podido. Llego cansada, pero lo estoy realizando. Si no, ya me hubieran dicho, "Ya mejor no venga."





LEGRESLEY:

¿Sabe si algunas personas también tienen sensibilidades o problemas con la tos o otras cosas por los químicos?





ALCALÁ:

Pues personas de comentarios o que han dado los mismos del grupo de la Coalición, sí he visto más. Tengo una amiga que no la he visto por algunos años, pero trabajé con ella también limpiando casas. No sé ella cómo estará porque en aquel tiempo estábamos las dos jóvenes. Pero después yo me enfermé. Yo no sé cómo está ella. Hace mucho tiempo que no la veo. Solamente los testimonios de las personas que hay en la Coalición.





LEGRESLEY:

¿Se identifica como mujer?





ALCALÁ:

¿Que si me identifico como mujer? Sí.





LEGRESLEY:

¿Y cómo se identifica en términos de su raza o etnicidad?





ALCALÁ:

Ahí tengo un--dice mi hija que--yo siempre pongo que soy de raza blanca, porque ahí solamente dice indígena o de raza negra o afroamericano o cosas así. Pero yo no soy nada de eso. Entonces yo nada más pongo--si hay latino, pongo latino, pero si no, pongo blanco. Pero ella dice que no, que somos indígenas, que tenemos que poner que somos indígenas.





LEGRESLEY:

¿Cree que su país de origen ha afectado su tratamiento en términos de ayuda médica o la habilidad de ir a un doctor?





ALCALÁ:

¿Mi país de nacimiento?





LEGRESLEY:

Sí, o etnicidad--o como indígena, ¿cree que es más difícil?





ALCALÁ:

O, sí. Por ejemplo, si soy latina, ¿se me hace más difícil ir al médico o ir a que me traten en un hospital? Eso pienso que no. Gracias a Dios aquí te reciben en un hospital, aunque no tengas dinero y luego ya ves como pagas. Luego ya te llega un bill o algo, ¿verdad? Pero te reciben y te tratan. El asunto aquí es, ¿cómo vamos a pagar el bill después? ¿Cómo vamos a tener dinero para pagar eso? Entonces, ese es el asunto. Pero si tuviéramos un seguro médico que por lo menos pagara una parte y nosotros otra parte o cosas así, sería diferente.

Si se pudiera hacer como un sindicato de estas personas trabajadoras de casa, de personas cuidadoras del hogar--porque es mucho – son muchas--mira, están las personas que trabajan cuidando las personas que están enfermas en sus casas. Mi hija trabaja con una persona que no puede caminar. Está en silla de ruedas. Es una persona mayor. Entonces ella trabaja ahí en su casa. Igual lo mismo limpia su casa, le hace la comida, lo atiende a él, lo baña y ella es una persona--esas personas también caben en este. Las personas que limpian solamente las casas, que no hacen cuidar un enfermo, pero que limpian la casa, también pueden quedar aquí si se hiciera un sindicato de estas personas. Que se registren y que puedan, por ejemplo, ya darles seguro médico, ¿verdad? Como, por ejemplo, los que trabajan en construcción que tienen su propia unión. Entiendes, que hubiera una unión para este tipo de trabajadoras que vea por nosotros. A lo mejor nos tocaría ahora pagar la unión, pero tuviéramos a alguien que nos defendiera.





LEGRESLEY:

Y usted mencionó que trabaja para los más jóvenes en la Coalición también. ¿Qué problemas son diferentes o los mismos en el pasado y en el futuro?





ALCALÁ:

Pues mira. Yo pienso que en el pasado--trabajamos nosotros primero, porque somos inmigrantes de otro país. No conocemos todos nuestros derechos--que, aunque no tenemos un papel o algo, que seamos residentes legales--como ser humano hay una ley que nos protege. ¿Verdad? Entonces eso es una cosa de en el pasado: que no tenemos toda la información y también que venimos con la necesidad de trabajar. Y gracias a Dios, ya las trabajadoras de ahorita vienen más listas, con más inteligencia, más que dicen, "No, eso no está bien."

Ahora que se ha descubierto mucho que los químicos nos hacen daño. Por ejemplo, yo cuando era joven no sabía todo el daño que podían hacer los químicos. Pero ahora las personas más jóvenes, ellas ya saben que les hace daño y las personas de ahora ya están un poquito más preparadas. Y también es por eso que existe la Coalición, porque se está haciendo eso. Entonces las personas como yo que ya estamos mayores, pues nos queda solamente apoyar para que ellas ya tengan el beneficio. A lo mejor yo ya no voy a poder agarrar que, voy a ir a limpiar una casa, me van a dar un seguro médico, ¿verdad? O me voy a pagar la unión. No, porque a lo mejor ya estoy mayor y ya no. Pero lo que me interesa es los que vienen, que ellos sí puedan tener para que no les pase lo que a mí.

Por ejemplo, mi hija esta, que cuida a esta persona enferma. Lo ha cuidado durante la pandemia. Entonces ella, como te digo, ella le limpia su casa también y le paga poquito. Entonces le pagan poquito porque le pagan cash. Creo que la otra persona que ayuda a cuidar al señor, esa es a la que le llega el cheque y luego le paga a mi hija. Entonces lo que pasa en este caso es que mi hija, cuando en el tiempo el de ahorita que estaba yendo la pandemia, ella usaba la mascarilla, ¿verdad? Se ponía la mascarilla, y entonces el señor le dijo un día, "¿De dónde estás agarrando las mascarillas?" Dijo, "Pues las estoy agarrando de aquí de las que tú tienes, ni modo de que yo vaya a comprar." Dijo, "No quiero que agarres mascarillas, porque esas mascarillas son para mí."

Dijo, "Pero es para protegerte también a ti. Yo vengo de afuera, tú estás aquí adentro. Y también es para protegerte a ti mismo y protegerme yo también." Porque la otra muchacha que lo cuida trabajaba en una tienda. Entonces esa muchacha tenía más riesgos porque mi hija nada más llega aquí a su casa. Pero la otra muchacha tenía más riesgos porque trabajaba en una tienda. Entonces no le permite usar las mascarillas. Entonces no les da herramientas de trabajo. O sea, una mascarilla, simplemente como una mascarilla.

Y así hay muchas personas que no quieren poner ellas sus propios trapos para limpiar o que no pueden--compran líquidos que son los más baratos, a lo mejor los más fuertes o a lo mejor más tóxicos, pero si son más baratos.





LEGRESLEY:

¿Qué productos usa en su propia casa? ¿Son diferentes?





ALCALÁ:

Sí. Después de que tomé este curso que vi que simplemente limpiando con el vinagre se quita hasta el moho y no es tóxico para uno, yo siempre tengo el vinagre y jabón para trastes. Y no hay necesidad de usar líquidos fuertes porque no está tan sucio. O sea, ¿para qué le vas a poner cloro a una bañera si no está sucia? Entonces si lo estás haciendo con frecuencia, ese quehacer, eso de estar limpiando--pero eso es en mi casa. Las casas de afuera, que uno las limpia, los dueños no las limpian. Ahí esperan a que uno vaya a tallar.





LEGRESLEY:

¿También tiene problemas con cosas como perfumes o solamente con los productos de limpieza?





ALCALÁ:

Solamente productos químicos.





LEGRESLEY:

¿Usted lleva perfumes y está bien?





ALCALÁ:

Sí, el perfume está bien, pero, por ejemplo, los productos químicos. Afuera ahora--en este tiempo hay mucho mosquito que pica. Entonces mi esposó el otro día compró una insecticida para los mosquitos y también no la pude soportar. Me lastimó. O sea que ya quedé lastimada. ¿Pero los perfumes? No siento tanta molestia, no siento molestia, pero solamente con los químicos. Así que aquí en casa no podemos usar químicos para limpiar. Para nada.





LEGRESLEY:

¿Hay cualquier cosa que le gustaría compartir?





ALCALÁ:

Sí, solamente quisiera hacer un comentario y una petición, sé que esto lo estás grabando y pueden verlo muchas más personas. Quisiera hacer una petición para estas personas que están trabajando en esta condición. Ojalá que puedan hacer una unión. Hay muchas más personas que trabajan también como en la agricultura, que también usan las insecticidas y todo eso, que es lo mismo porque te digo que mi esposo compró la insecticida para los moscos y también me dañó. Entonces es lo mismo. Es el mismo problema. Quisiera que--mi deseo es que pudiera haber una unión, que pudiera alguien ayudarlos para que puedan darle un seguro médico a estas personas, que su trabajo sea un poquito mejor pagado. Porque te digo que a mi por cincuenta dólares que me daban por limpiar la casa, pues no me ayudaba tanto. Es muy, muy poco dinero. Quizás a lo mejor si se les pusiera el mínimo, ¿verdad? Que les paguen el mínimo por horas. El mínimo por horas y así pudiera ser un poquito mejor.

Sé que existen compañías que te contratan para que tú vayas a limpiar las casas, pero eso es también bien súper matado, porque ellos por ganar dinero te llevan a una casa y a las dos horas te recogen, y te llevan a otra casa y así, ¿verdad? Te traen por--limpias como tres o cuatro casas en el día, porque mientras más casas limpias pues es mejor para ellos, y ellos te pagan. Entonces da lo mismo, no te pagan lo suficiente, pero es la necesidad de ganarte cincuenta dólares a no ganarte nada. Pues entonces a veces uno se va y se gasta los cincuenta--se gana los cincuenta dólares, aunque sea. Es la necesidad. Entonces sí, me gustaría que se pudiera hacer algo por todas estas personas, que tengan ayuda y que su trabajo sea reconocido. Sé que el trabajo menos reconocido es el de la casa. Pero este es un trabajo que tiene que ser reconocido, tiene que ser reconocido y tiene que ser valorado, y valorada las personas que lo hacen, porque a todo mundo le gusta tener una casa limpia. Entonces tienen que valorar a las personas que les hace esa limpieza.





LEGRESLEY:

Bueno. Gracias, Raquel, mucho por su tiempo.





ALCALÁ:

Muchísimas gracias a ti. (Fin de entrevista)